Pegasus de los primerísimos noventa, no fue
míííítica ni nada, no era la más buscada ni brillaba por su diseño, en unos años en los que cayeron las mejores rarezas de la historia. Veinte años después, un par de colores bien puestos hacen una versión que raya con la excelencia de unas
NB1500.
Atittude, una zapa asociada a Patrick Ewing y la segunda parte de los ochenta, clasicazo donde los haya... entonces llega Jeremy Scott para convertirla en una aburrida frikada más.
Como salirse versionando una zapa casi del montón y como cagarla con una de las mejores de la historia.
5 comentarios:
Me alegra la versión pero me duele en el alma la cagada... ¿No hay cárcel para esta gente?
todo es ponerse a recoger firmas
Las pegasus me flipan, en ese y otros tantos colores. En una tienda de Donosti hay unas (aquí apenas llegan zapas de ese tipo) blancas con algo naranja que me tienen loco.
Desde luego han dado en el clavo con esta serie de Pegasus, bien colocadas para suceder a mis viejas Stab que no me las quito cuando llega el frio desde hace años. Lo de musthave se lo dejo a los moñas.
para la kobe IV se inspiraron en esa pegasus por cojones, son clavadas
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